
COMBATIENDO LAS SECUELAS POSTCOVID 19 Y LAS ENFERMEDADES RESPIRATORIAS
Día a día damos nuestro máximo esfuerzo por obtener los mejores resultados a su tratamiento, logrando así una mejor calidad de vida y juntos superar las enfermedades que se nos topen en el camino.
En la clínica de Medicina Hiperbárica cumplimos los estrictos protocolos de bioseguridad.
Secuelas Post COVID 19
Terapia física
La Terapia Física está indicada para pacientes que estuvieron internados por más de 15 o 20 días y presentan secuelas a nivel físico como debilidad muscular, rigidez articular, contracturas y dolores musculares o alteraciones en el equilibrio, debido a la falta de movimiento. Y con mayor razón si el paciente tienen alguna enfermedad crónica preexistente como diabetes, hipertensión, problemas renales, enfermedades respiratorias, etc.
Terapia psicológica
La Terapia Psicológica en situaciones de crisis se orienta hacia la expresión de los sentimientos y experiencias internas de la persona en relación con los eventos que provocaron el desajuste, facilita la elaboración del duelo ante la pérdida de seres queridos o de bienes materiales; contribuye a adecuar afrontamientos y modificar comportamientos; brinda acompañamiento emocional y los recursos psicológicos necesarios para enfrentar una situaciones difíciles.
Adicionalmente la medicina hiperbárica es un excelente complemento para tratar las siguientes enfermedades:
El asma provoca que las vías respiratorias de los pulmones se inflamen y se estrechen. Esto hace que se presente dificultad para respirar como sibilancias, falta de aliento, opresión en el pecho y tos.
Los síntomas pueden ser tos, fatiga, dificultad para respirar, fiebre y escalofríos, molestias en el pecho, producción de mucosidad (esputo), que puede ser transparente, blanca, de color gris amarillento o verde – rara vez, puede presentar manchas de sangre.
Es una enfermedad pulmonar que se produce cuando el tejido pulmonar se daña y se producen cicatrices. Este tejido engrosado y rígido hace que sea más difícil que tus pulmones funcionen correctamente. A medida que la fibrosis pulmonar empeora, tienes cada vez más dificultad para respirar, tos seca, fatiga, dolor muscular y articular, pérdida de peso sin causa aparente, hinchazón de los dedos del pie.